- En un mundo saturado de información y acechado por la sombra de la desinformación, Colombia ha dado un paso firme que resuena en el ámbito internacional.
Bajo la instrucción directa del presidente Gustavo Petro y en un diálogo estratégico con la UNESCO, el país sudamericano ha parido una iniciativa que hoy lo consolida como un referente global en Alfabetización Mediática Informacional (AMI): el ecosistema Digital-IA, Educomunicación para la paz.
Este ambicioso proyecto no es un simple programa; es una robusta caja de herramientas lanzada al corazón de América Latina y el Caribe para combatir el «flagelo» de las fake news y la concentración mediática.
Su presentación oficial en la Semana Mundial AMI de la UNESCO no hizo sino confirmar su relevancia.
El activista tecnológico y experto en ciberseguridad, Farid Amed, artífice del programa, fue enfático al describir la nueva realidad digital:
“Hoy cada ciudadano y ciudadana provista de conectividad, telefonía inteligente y conexión a plataformas de opinión, debe considerarse como un potencial medio de comunicación.
Esto abre grandes retos en el mundo contemporáneo y por eso debemos abrirnos a una nueva educación mediática que desde el pensamiento crítico y la experticia tecnológica apele al prosumo de la información para impulsar la verdad y el pensamiento científico y luchar juntos contra el flagelo de la desinformación y los nocivos efectos de la concentración mediática.”
Un Ecosistema que Va Más Allá de la Respuesta.
El origen de Digital-IA se encuentra en el llamado urgente de la UNESCO a sus países miembros para que desarrollaran estrategias que frenaran la desinformación, un fenómeno que «tergiversa información, manipula mentes y ocasiona daños reales e irreparables».
Colombia, sin embargo, no se limitó a acatar. Fue pionera.
El ecosistema Digital-IA se compone de un tríptico innovador y disruptivo:
* Academia (Plataforma e-learning): Un centro de conocimiento con más de 400 contenidos gratuitos. Ofrece tres cursos estructurados (Crossmedia + AMI + IA, Multimedia + Sostenibilidad, y Transmedia)
que enseñan a los ciudadanos sobre coherencia narrativa, engagement, superación de discursos de odio, identificación de bots y reflexión crítica ante la polarización algorítmica. El objetivo: formar al ciudadano para el prosumo informativo.
* Producción Audiovisual: El programa alimentó las redes con cerca de dos mil contenidos audiovisuales a través de una serie web (En Línea) y una microserie (De AMI para TI), publicadas en las principales plataformas (@digitalia_col) para complementar la alfabetización.
* Botilito (El Agente IA Antidesinformación): Quizás la joya de la corona. Se trata del primer agente de Inteligencia Artificial desarrollado por la iniciativa, diseñado específicamente para la lucha contra la desinformación.
Su función es crucial: identificar si un contenido ha sido alterado por agentes sintéticos.
El camino de Colombia es claro. Con Digital-IA, el país no solo combate las sombras de la mentira digital, sino que también empodera a sus ciudadanos, preparándolos para ser «prosumidores» de información y constructores de una cultura de paz mediática.
La constancia electrónica que otorgan sus cursos gratuitos es un símbolo de esta nueva ciudadanía crítica y tecnológica.
La batalla por la verdad en el continente tiene ahora un faro de luz en Bogotá.

